A la gente le gusta viajar. Bueno, a la mayoría de la gente
le gusta viajar; conozco un par de bichos raros a los que no les gusta y no me
lo explico, pero allá ellos. Para la mayoría de las personas, viajar significa:
dejar la rutina, salir a orearse, conocer mágicos lugares, deleitar el paladar
con comidas exóticas, llenarse de espiritualidad, y para algunos, hasta
descansar. Se acerca la semana santa, y con ello: vacaciones. Espero que ya
tengan listos sus “flotis”.
¿Que pasa cuando nos dirigimos a un lugar que no conocemos?
Podemos hacer dos cosas: la primera es ir en papel de Indiana Jones, es decir,
de explorador. Lo cual está bien. Llegar a un lugar sin saber a ciencia cierta
cual es plan a seguir, sin un orden preestablecido de lugares a visitar, es lo
más cercano a vivir una auténtica aventura a lo salvaje.
Ventajas de ir en pos de la aventura: La sensación de
descubrir un lugar por ti mismo es increíble. Caminar por las calles que no destacan en los mapas turísticos es fantástico, así puedes conocer a la gente en
su verdadero hábitat. Puedes ver que cosas guardan en sus patios, como son los
edificios de departamentos, puedes comprar en las tienditas de la esquina auténticos productos de uso diario, ver
que animales tienen en sus corrales. A algunos hasta les gusta platicar contigo
de lo relevante del barrio, y si tienes suerte, hasta te invitan una cerveza en el bar
de la localidad.
"Camina por la nieve", decían "será divertido." decían... |
Desventajas de ir en pos de la aventura: puedes terminar
perdido en medio de la nada (entiéndase nada, como un camino en el que llevas 3 horas de recorrido a y no ha pasado un auto) o puedes llegar a la fiesta del
pueblo, y todo es muy bonito hasta que descubres que no hay camas disponibles
en ningún hotel ni hostal, y terminas durmiendo solo bajo el puente o en su
defecto en una banca del parque. Lo cual, ya en la perspectiva que te da el tiempo, también es
divertido. Incluso puedes llegar a una ciudad y confiar en que el taxista te va
a llevar a tu hotel. Cuando te das cuenta son las 4:00AM estas del otro lado de
la ciudad y con $40 dólares menos. “Yo
se a donde tu vas amigo!”.
-12°C
Y en segunda podemos tomar la opción de lo que yo llamo: El método del librito
Para algunas personas eso de lanzarse a la aventura no es lo
suyo. Su padecimiento de trastorno obsesivo compulsivo no permite que algo esté
fuera de control. Y entonces elaboran planes cuidadosos y cronometrados al
dedillo. Ok, tal vez no padezcan de trastorno obsesivo compulsivo, pero les
gusta viajar con conocimiento de causa. Antes de emprender su viaje se informan
de que lugares visitar, como llegar, en que horarios y cuanto cuesta el ticket
para acceder al museo, zoológico o parque recreativo. Afortunadamente hay gente
que pertenece al grupo de los aventureros que escribe para el grupo de los que
siguen el librito. Podemos encontrar reseñas de viajes en revistas, periódicos,
blogs, páginas especializadas como www.tripadvisor.com.mx
y por último las famosas y muy, muy, muy útiles Guías de Viaje.
Digamos que estos cuates hacen el trabajo duro para que
nosotros, los que no somos tan aventados, podamos disfrutar de igual forma.
Estas guías por lo general tienen recorridos armados para todos los
presupuestos, con la historia detallada de los lugares más icónicos, sitios de
interés general, información sobre como utilizar el transporte público; los
hoteles y restaurantes de 1 a 5 estrellas, etc. Insisto para todos los
presupuestos. Respecto a estas guías, se
de mucha gente que las coleccionas y como todo material de lectura, con la
suficiente imaginación, viajan a esos lugares. Por ejemplo: Aunque tal vez
nunca vaya en mi vida al país de Jordania, se que autobús tomar para visitar la
capital de Nabatea, Petra.
Existe una tercera opción, pero esa ya se las recomiendo
para su jubilación, se trata de viajar en grupo dentro de un tour que les hace
todo el itinerario y les da sólo 5 minutos para tomarse la foto en el Partenón
en Atenas o en la Torre Eiffel en Paris. A algunos les funcionará esto, a mí no.
He tenido la oportunidad de viajar en las dos modalidades:
en modo explorador (con noche bajo el puente incluida) y con “El método del
librito” y con ambas he aprendido mucho de los lugares que he visitado, he
conocido mucha gente y sobre todo, me he divertido como chiva loca en
cristalería (debe ser divertido no lo nieguen).
Para conocer más sobre guías de viajes no dejen de visitar: